Tuesday, May 30, 2006

Los Otro Factor Equis

Por donde se mire la penúltima letra del alfabeto está muy de moda en Colombia. Pero hay cuatro factores equis que demandan nuestra mayor atención que el trillado reality, me refiero puntualmente a la extradición, expiación, extinción y excomunión; presentados a continuación en su estricto orden de impacto social.
Extradición
La mera idea que a uno se lo lleven encadenado a "las mazmorras del imperio" -como lo describe sin vacilación un renombrado escritor y ahora locutor Tulueño- sobra para no desearle la extradición ni al más despreciable delincuente. Permanecer obligado bajo la frágil égida del coloso del norte no deja de ser una propuesta aterradora; habría no más que preguntarle a cualquiera de los despachados para verificar tal conjetura más allá de la duda. No en vano los primeros extraditables decían preferir "una tumba en Colombia a una celda en los Estados Unidos."Sin embargo, el tamaño problemita de impunidad que surge a la hora de someter ante la justicia a tanto reo que ostenta inmenso poder a razón de su incalculable fortuna da para razonar su aplicación. Además de lo conveniente que resulta para el gobierno desembarazarse de tajo de las patatas más candentes de la comarca.A pesar de lo hondamente indignante que presume relegar nuestra soberanía jurídica a una sociedad que cada día estamos viendo con menos merecimientos y más falencias, en capitulación a ese pragmatismo tan rentable se supone debiéramos tal vez agradecer la existencia del gélido vecino norteño que acepta nuestras más marchitas flores sin contemplación alguna. Igualmente la mera manutención tras rejas de esta crema y ñata debe costar un pequeño Potosí.
Expiación
"Perdónanos nuestras ofensas, como nosotros perdonamos a los que nos ofenden," reza nuestra oración más popular. El problema es que para llegar a la instancia de expiar la cantidad de atrocidades cometidas en el transcurso de varias décadas por los paramilitares, la Corte Suprema de Justicia ahora pretende aplicar el factor anterior. Sin embargo, cuando se desmenuza el prontuario de estos alzados a la fuerza la postura de los magistrados no da para menos. Tampoco es difícil imaginar el terror que suscita en los sobrevivientes toparse de cara con el fulano que desbarató su familia a punta de motosierra. A fin de cuentas, por contravenciones mucho menos cruentas se supone Jehová borró a Sodoma y Gomorra de la faz de la tierra. Pero cuando nos damos a la tarea de efectuar un balance de los actos terroríficos a que muchos compatriotas fueron sometidos por parte de los paramilitares, pues llegaremos a la triste conclusión que conviene expiar hasta su más horrenda barbarie con tal de que no les repitan la dosis. El problema es que tirios y troyanos andan pensando los unos en pescar los otros --y estos a no dejarse coger-- con la franela por los tobillos.
Extinción de Dominio
A quién no le pareciera espantoso que le arrebaten su rancho con todos los chécheres a bordo. El estratosférico nivel de criminalidad que nos inunda ha llevado la rama judicial en su afán de restituir el orden social a emplear esta desagradable figura jurídica para despojar a los bandidos de sus bienes mal habidos con el fin de anular su colosal poderío económico. No obstante, tal razonamiento -o falta de ello-nos obliga analizar la contracara sociológica de esta odiosa instancia jurisprudencial. Hablo de las ganancias emanadas de actividades declaradas lícitas que causan mayor daño a la sociedad que aquellas provenientes de acciones ilegales. Caso específico la producción, manufactura y comercialización del tabaco y las armas explosivas, que ocasionan enorme destrucción y muerte. El cigarrillo supera en víctimas a todas las drogas ilícitas combinadas, o sea, más gente muere por causa del tabaco que la sumatoria de todos los adeptos que perecen por el consumo de cocaína, bazuco, crack, heroína, opio, marihuana, hashish, ecstasy, amphetaminas, etc., etc. Y si no cree le encimo los muertos en accidentes de tránsito, esculque las estadísticas y verá. Ni hablar de la gran cantidad de gente que muere anualmente alrededor del mundo por efecto de las armas de fuego y bombas de toda índole. En Colombia no más se ha convertido en la principal causa de muerte entre hombres de 15 a 45 años de edad.No obstante, los magnates del tabaco viven a cuerpo de rey y los trabajadores que ensamblan las minas anti-persona reciben el mismo trato social de aquellos que arman licuadoras o televisores. El año pasado un prestante locutor de la radio elogió la venta de Coltabaco a la Phillip Morris como uno de los mayores logros financieros en la historia del país. No estaría de por más que este celebérrimo periodista -quién obviamente fuma- se asome al pabellón de cancerosos en cualquiera de los grandes hospitales para ver de primera mano lo que le espera. Mi padre norteamericano fumaba dos paquetes al día y murió de cáncer a los 57 años, lo más doloroso que es que cinco años más tarde mi madre murió del mismo cáncer sin haberse fumado un solo cigarrillo en su vida. Sobra decir como considero que los bienes de los fabricantes de esos puchos que mataron a mis viejos debieran ser sujetos a extinción de dominio. Todas las personas involucradas en este maligno negocio deberían ser extraditadas o pagar en una cárcel colombiana por una vil conducta social que no difiere en lo más mínimo de aquel que produce y vende cocaína. Si pudieran hablar, sin duda las personas muertas por armas de fuego coincidirían en mi apreciación que estas causan más daño a la humanidad que cualquier vicio y debieran ser declaradas ilegales de acuerdo a su alta peligrosidad. Desde todo punto de vista, aquel que se gana la vida construyendo un aparato diseñado con el expreso propósito de volarle las piernas a un ser humano incurre en un acto de inmoralidad mayúscula. Seguramente todos aquellos que perdieron sus extremidades por consecuencia de las minas anti-persona coincidirían en calificar los bienes adquiridos por los salarios de estos fabricantes como mal habidos y sujetos a la aburridora extinción de dominio.
Excomunión
Ojalá todos nuestros aprietos fueran tan banales como este, algo así como quedar fuera de la lista de regalos de Papá Noel, o que el Ratón Pérez lo pase a uno por alto cuando se caen los dientes de leche. Sin duda el aborto es una práctica abominable, pero duele que andemos tan confundidos para no darnos cuenta de la incongruencia de permitir que unos hombres quienes por determinación propia se supone jamás procrearán anden dictando cátedra de maternidad. ¿Que pena entonces considera el Cardenal colombiano que excomulgó a los magistrados que aprobaron el aborto en circunstancias específicas, debieran merecer los arriba mencionados? Que el despistado prelado no haya excomulgado al irresponsable progenitor de la criatura que defiende con tanto ahínco demuestra una evidente incoherencia por parte de la Iglesia Católica. Como invoca el dicho, se necesitan dos para bailar tango. El amaño que le da la iglesia a esta figura de jurisprudencia teológica le resta credibilidad. Ver como el clero excomulga personas por actos que de alguna manera socavan su prestancia social por encima de acciones barbáricas como los arriba descritos demuestra una completa discrepancia racional, lo cual hace difícil tomar la excomunión en serio. Además que no existe la forma de conocer la opinión de Dios al respecto.
Me late apropiado cerrar esta corta epístola con mi poema rupestre predilecto:

En la Villa de Beodez
En la Villa de BeodezTodo, todo es al revés,
Los zapatos en las manos Y los guantes en los pies.

En la Villa de BeodezTodo, todo es al revés,
Cuando compran pagan cuatro,Cuando venden cobran tres.

En la Villa de BeodezTodo, todo es al revés,
El ratón corre al gato,Y el ladrón condena al juez.

En la Villa de BeodezTodo, todo es al revés,
Lo que ganan en un año,Se lo gastan en un mes.

(Autor Anónimo)

Saturday, May 20, 2006

Sayonara Soraya

El deseo más ferviente de Soraya fue que su deceso a causa de un penoso cáncer de seno no representara una derrota sino que sirviera para sensibilizar a las mujeres sobre esta grave y cada día más común enfermedad; una laudable pretensión que logró sobradamente a través de las sentidas palabras con que se despidió en su página web. Es doloroso que se requiera de la desaparición de una persona ilustre y querida como Soraya para llamar la atención hacia un aspecto tan fundamental del patrimonio humano como es la salud. En homenaje a esta talentosa y bella artista que sucumbió en la flor de su existencia, comparto conocimientos adquiridos durante 30 años que han de ser muy valiosos para quienes realmente buscan prevenir y curar el cáncer de seno. Digo esto en virtud que los medios de comunicación usualmente definen la detección precoz como prevención, la cual no constituye tal. Si la enfermedad es detectada aun en su etapa inicial esto simplemente confirma que la paciente ya está enferma e indiscutiblemente el cáncer no se previno. El mero hecho de realizarse un examen no implica prevención de ninguna índole, la única manera de efectivamente prevenir una patología fisiológica es no permitir que este ingrese al cuerpo, y esto no se puede realizar sin observar los preceptos biológicos que gobiernan al organismo humanoy un régimen alimentario adecuado. Aunque no se dio por aludido por el lamentable deceso de su paciente insigne, ni por obvias razones se refirió a su incapacidad de curarla, cuando al médico que trató a Soraya en Colombia se le pidió una recomendación para prevenir el cáncer de seno este reseñó en primer plano el ejercicio y la dieta. Es la dieta el factor más determinante en la prevención y curación de cualquier cáncer y, sea dicho, la inmensa mayoría de todas las enfermedades graves como la diabetes, leucemia, hipertensión, obesidad, afecciones cardíacas, etc. Es de suma importancia comprender que casi todas las enfermedades son producto de una mala dieta y debemos circunscribir como dieta todo aquello que ingresa a nuestro organismo aunque no sea de manera intencional ni con propósitos nutricionales. Me refiero particularmente a los mortíferos gases que emiten motores de combustión interna y demás tóxicos industriales que se encuentran en la atmósfera; los cuales, sin que lo queramos, se convierten en parte de nuestra dieta cotidiana y deterioran nuestra salud. Son poquísimos los Colombianos --y humanos en general-- que han tenido la oportunidad de familiarizarse con la estrecha relación entre dieta y salud. Infortunadamente la mayoría han aprendido a comer solo para satisfacer el paladar y no todo el cuerpo. Lo primero que debemos saber para alimentarnos de tal forma que no nos hemos de enfermar es que el cuerpo humano es regido por unas parámetros biológicos que se han de observar de manera irrestricta, de lo contrario nuestro organismo se debilita y pierde su inmunidad natural contra las enfermedades. Nuestra composición dental indica de modo inequívoco la proporción en que hemos de ingerir nuestros alimentos en cada etapa de la vida. Los adultos poseen 32 dientes que tienen una función determinada. Tenemos 8 incisivos para rasgar frutas y verduras, 4 caninos diseñados para desgarrar carne y los demás son molares y premolares destinados a moler granos y cereales integrales. Entonces, una sencilla operación matemática arroja los porcentajes de los tipos de alimentos que debemos consumir: 25% frutas y verduras (preferiblemente orgánicos), 12.5% carne (ojalá blanca) y el resto en granos y cereales (siempre integrales). Otro factor igual de importante es la calidad de los alimentos, para adquirir y mantener una buena salud se debe consumir alimentos integrales que contengan los nutrientes necesarios para fortalecer el cuerpo y prevenir que las enfermedades ingresen. Integral significa que el alimento se encuentra entero, que no ha sido degradado por algún proceso industrial y aun contiene todos sus nutrientes intactos. Desgraciadamente pocos se preocupan por la procedencia de sus alimentos, no se interesan por saber como ni donde fueron cultivados o elaborados y el afán de producir ganancias al plazo más corto ha hecho que la industria alimenticia desconozca la ventaja nutricional y biológica de consumir alimentos integrales. La gran mayoría de las personas consumen arroz blanco y harina blanca, lo que quizás desconocen es que para blanquearlos hay que someter los granos integrales a un proceso de refinamiento en un molino mediante el cual se les quita el germen y el salvado. Resulta que hasta el 85% del valor nutritivo se encuentra precisamente en el salvado y el germen removidos por este procedimiento industrial superfluo y cuyo único objetivo es hacerlos más agradables a la vista. Ahí se eliminan los elementos de mayor contenido nutricional y se pierde la fibra; quedando solo el almidón, la parte que menos nutre y más engorda. Al no consumir la sustancia fibrosa que asiste en la pronta evacuación del intestino, el engrudo producido por el almidón se estanca en el intestino donde se pudre, provocando obesidad y convirtiéndose en foco de cultivo de todo tipo de enfermedades letales. Aquellos que consumen alimentos integrales gozan de una más fortaleza física que les proporciona mejor salud, lo cual les otorga mayor claridad mental y esto conduce a una superior calidad de vida. Los niños alimentados con arroz y pan integral se enferman menos, se vuelven más listos, aprenden más rápido y en general son más felices. Vale resaltar que para expulsar cualquier patología del torrente sanguíneo de la forma más expedita los pacientes deberán de abstenerse de consumir alimentos procesados y empaquetados o congelados que contengan cualquier tipo de colorante, preservante o sabor artificial. El cuerpo humano no puede asimilar o eliminar estos químicos y cuando se nos quedan adentro la defensa natural del organismo es acumularlos en alguna parte y estas aglomeraciones se convierten en tumores; los cuales son un problema mayúsculo para eliminar.Tan importante como saber con que alimentarse y en que proporción debemos hacerlo para no enfermarnos es saber como comer. Aunque parezca inverosímil, pocos reconocen la importancia de la masticación. Fíjese y verá como muchos pasan cada bocado luego de apenas 5 masticadas en promedio; lo que coloquialmente se describe como tragar entero, algo que todos sabemos no conviene. La digestión se inicia en la boca cuando los dientes trituran los alimentos y estos se mezclan con las enzimas segregadas por las glándulas salivares. Mientras más digerido llega el bolo alimenticio al estómago más fácilmente asimilamos los nutrientes, cuando comemos a la carrera, para simplemente digerir los alimentos que tragamos enteros, el cuerpo tiene que expender inútilmente energías vitales que normalmente serían destinadas a sostener el sistema inmune. Es por eso que para mantenernos saludables se debe masticar cada bocado un mínimo de 30 veces, 50 veces para aquellos que por descuido o desconocimiento han adquirido alguna enfermedad, como cáncer del seno. Si tenemos en cuenta que la causa primordial de muchísimas enfermedades es una mala alimentación, entonces es de lógica que estas se pueden revertir consumiendo una buena alimentación integral y siguiendo puntualmente las anteriores observaciones. Si desde el momento en que se le diagnosticó cáncer de seno Soraya hubiera consumido una estricta dieta integral seguramente la calidad de vida de nuestra célebre cantante hubiera mejorado de forma ostensible y posiblemente se hubiera sanado. Meredith McCarty es la persona quien hace 3 décadas me enseñó los preceptos aquí condensados y hoy día es conocida como una de las personas más destacadas en la prevención y curación de cáncer de seno a través de la dieta macrobiótica. Tan es así que fue invitada a la Casa Blanca por Hillary Rodham Clinton para transmitir a la entonces Primer Dama de los Estados Unidos sus elevados conocimientos culinarios. Tuve el privilegio de traducir al Español para la Sra. McCarty él más completo tratado terapéutico que haya conocido sobre la prevención y curación de cáncer de seno, el cual se puede obtener en la Internet por US $30, una cifra realmente simbólica considerando la valiosísima información contenida en este extraordinario documento. Imagínense el sufrimiento y dinero que hubiera ahorrado nuestra amada Soraya si como a la señora de Bill Clinton alguien la hubiera guiado hacia tales conocimientos; no tengo la menor duda que una mujer de tan profunda sensibilidad se hubiera acogido con gran alegría a esta maravillosa disciplina, una opción de vida que bien la habría podido salvar. Es normal que las personas desconozcan los poderes curativos de los alimentos, pero además de ser la terapia más antigua del mundo, las estadísticas la avalan ampliamente. No es más que se tomen la molestia de averiguar el porcentaje de curaciones obtenidas a través de la macrobiótica en comparación a la quimioterapia para enterarse de la enorme efectividad de la primera versus la absoluta inoperancia de la segunda. Con la macrobiótica el paciente no tiene que comprar un solo medicamento ni requiere de gasto adicional al de los mismos alimentos, ni siquiera tendría que pagar una consulta médica, mucho menos realizarse una cirugía altamente invasiva, sicológicamente humillante, supremamente dolorosa y completamente innecesaria como lo es una mastectomía radical. La gran mayoría de los practicantes de medicina convencional, como es el caso de los cancerólogos que atendieron a Soraya, acuden a la quimioterapia, un costoso fármaco supremamente tóxico que muy rara vez cura al paciente y además produce unas secuelas espantosas. Vale reseñar como una encuesta realizada hace un par de años en Inglaterra reveló que el 75% de las prescripciones médicas no surten efecto alguno sobre la condición de los pacientes ni contribuyeron a su curación. Otra investigación científica indica como los rayos empleados para efectuar la mamografía son un agente cancerígeno. Atribución biológica sustentada por el hecho que la esposa de uno de los radiólogos más prestantes de Cali se encuentra en gravísimo estado de salud por consecuencia de un cáncer de seno. Sobra decir lo poco recomendable acudir a un médico incapaz de sanar a su propio cónyuge. Aprovecho esta triste oportunidad para extenderle un merecido jalón de orejas a los miembros de la medicina convencional que insisten en realizar costosísimos y traumáticos exámenes a sus pacientes con cáncer simplemente para confirmar que están enfermos y luego someterlos a las inclemencias de la quimioterapia. Pues son estos indolentes miembros de la profesión médica quienes mejor conocen del fracaso de esta injuriosa terapia para erradicar carcinomas del cuerpo y cuando no les funciona simplemente desahucian al paciente y le envían a morir en casa. Aquellos que desatendieron a Soraya no tienen más remedio que admitir su flagrante incompetencia y debieran disculparse ante la familia por su torpeza terapéutica. Es una verdadera catástrofe para la salud humana como aquellos considerados especialistas (en particular oncólogos, radiólogos, hepatólogos, cancerólogos y nutricionistas) desconozcan las bondades curativas de los alimentos. Considero un atropello inadmisible el terrible sufrimiento al que Unicáncer somete a los pacientes bajo su cuidado -en particular los niños- y debido al bajo nivel de éxito y alto grado de sufrimiento y mortandad que arroja la quimioterapia esta negligente organización está en mora de ofrecer la dieta macrobiótica como terapia alternativa y/o complementaria. Con el mayor respeto, difiero perentoriamente con la hermana de Soraya quien ante las cámaras de la televisión mundial tuvo el desatino de aseverar que el cáncer de seno es una aflicción incurable. La insto a que se comunique con Meredith McCarty al teléfono 415-381-1735 para ampliar sus horizontes al respecto, sobre todo porque presenta un preocupante estado de obesidad y obviamente posee un historial familiar que la hacen muy susceptible al cáncer de seno. Seguramente las mujeres de mi barrio dejarán de envidiar a la vecina más pudiente y gorda cuando se adviertan que su obesidad y sedentarismo también la convierten en candidata número uno para adquirir cualquier tipo de cáncer. Lo cierto es que la pobre dama, como todos los obesos, no disfruta de una calidad de vida agradable y ha de padecer una vejez muy, pero muy difícil.La fama y fortuna no garantizan salud, esta hay que buscarla, encontrarla y saber cultivarla, es así como invito a todos las recipientes de esta misiva a que asuman la responsabilidad de administrar su propia vida a través de una dieta realmente sana, su cuerpo -y eventualmente su familia- se lo han de agradecer profundamente. Asimismo, recomiendo toda persona que padezca cáncer no espere que su médico le desahucie y se acoja a la dieta macrobiótica de carácter urgente. Sugiero que las mujeres que han sido diagnosticadas con cáncer de seno se familiaricen lo más pronto posible con el tratado terapéutico de Meredith McCarty, toda vez que ella explica sus causas en un lenguaje sencillo y de manera detallada indica la mejor forma de combatirlo y posiblemente curarse. A fin de cuentas, no se ha visto que un cáncer pueda ser curado sin antes eliminar sus causas, que generalmente son de perfil dietético.A vuelta de correo electrónico enviaré a las personas que lo soliciten la Introducción a la Macrobiótica, un compendio que le iniciará en un nuevo camino hacia la salud, junto con las indicaciones de cómo adquirir la versión en Español de la Prevención y Curación de Cáncer de Seno.

Saturday, May 06, 2006

Nacionalización de Hidrocarburos en Bolivia

La nacionalización de los hidrocarburos en Bolivia por parte de su presidente electo Evo Morales no debe representar sorpresa alguna para los que seguimos de cerca el nuevo rumbo político de Latinoamérica en el tercer milenio, ya que fue este el principal caballito de batalla durante su campaña electoral. Invito a mis compatriotas Colombianos que ven con recelo esta insólita decisión, en especial los medios, a que lean un revelador libro titulado "La Concesión Barco," escrito por Álvaro Concha y publicado en 1981 por El Áncora Editores.
Estoy plenamente seguro que los lectores coincidirán en lo mucho que se hubiera beneficiado el país si a comienzos del siglo pasado hubiéramos tenido un Evo Morales al mando de nuestros recursos naturales. Infortunadamente desde entonces hemos sido gobernados por personajes cuyos verdaderos intereses jamás se identificaron con el bienestar del pueblo, mucho menos en lograr una distribución equitativa de la riqueza nacional. Porque ricos si somos -o fuimos, de lo contrario los europeos no se hubieran tomado la molestia de embarcar en semejante travesía para venir a saquearnos. Es de esperar que los Españoles se molesten porque de manera abrupta Evo les sacó la cucharilla de plata de la boca; en la actualidad hay una prestigiosa empresa de transportes que no nos deja olvidar uno de los atropellos más grandes de la historia cuando los Ibéricos se cansaron de enviar barcos atestados de mulas para llevarse el tesoro de Caribá -como le decían nuestros ancestros indígenas al maravilloso continente que habitamos. Estoy seguro que luego de leer el recuento de Álvaro Concha sobre el desvalijo del petróleo en Colombia pocos cuestionarán los motivos de Evo Morales por implementar tan drástica determinación. Radical --eso sí-- solo para los intereses de los inversionistas foráneos, porque el Boliviano del común debe estar bailando en una pata. Falta ver si el Sr. Morales cumple con lo prometido y esta nacionalización en realidad beneficie al pueblo. Pero sin duda la medida se convierte en motivo de gran esperanza si tenemos en cuenta que con los gobiernos anteriores el sufrido pueblo Boliviano no albergaba la posibilidad de recibir algo más que las migajas del producido de su propio hidrocarburo. Lo que hizo la familia Barco con nuestro petróleo es uno de los episodios más vergonzosos en Colombia y de veras siento pena ajena por la ilustre canciller Carolina Barco, a quien de ninguna manera se le puede imputar responsabilidad alguna por la deshonrosa actuación de su bisabuelito. De todos modos, tómense la molestia de enterarse lo que hizo el General Virgilio Barco Martínez con nuestro petróleo; eso sí, recomiendo que tengan un buen sedante a la mano para relajarse y no emprenderla contra el primer gringo con que se topen cuando se le atraviese semejante espina en el guargüero. Toda vez que mis antepasados fueron aguerridos Indios Pijaos, considero oportuno efectuar un análisis socio-político sobre nuestra ascendencia indígena; los cuales, por obvia razón, mantengo en alta estima. El 28 de Agosto de 1981 recibí una licenciatura en Sociología otorgada por la Universidad de California, Berkeley, valiosa formación académica que me faculta para emitir una instruida perspectiva acerca del fenómeno social experimentado por los indígenas de América con el arribo del europeo. Para tal propósito viene al caso analizar la mal llamada conquista de nuestros indígenas desde su punto de vista histórico. No se requiere ser vidente para imaginarse la inmensurable tristeza que para ellos significó perder de sopetón y por la fuerza su territorio, cultura, costumbres y lenguaje. La historia demuestra como todos los pueblos subyugados han luchado ferozmente por su libertad, en todas sus expresiones, y los nuestros no tenían porque ser la excepción.Apartándonos de la enorme maluquera que sin duda les causó la llegada de una gente que se presentó como agresiva y pronto se reveló como codiciosa e ignorante de la tierra y además les pareció mal oliente y sencillamente feos, observemos que la forma de gobierno y el sistema social de los Caribá era, comparada a la democracia y el capitalismo importado por los europeos, abiertamente socialista. Desde Alaska hasta la Patagonia los pueblos indígenas se gobernaban por un Cabildo de Sabios quienes formulaban las decisiones que habían de señalar su destino y todas sus deliberaciones eran exclusivamente enfocadas hacia el bienestar de la colectividad. La votación se efectuaba con una simple muestra de manos y aun nuestros nativos comprenden que no existe razón sensata para que un voto sea emitido de forma secreta, ya que todo aquel que labora para el bien común no tiene nada que esconder, ni favores que dispensar o represalias que temer. Igualmente, los ciudadanos acudían a esta corporación de ilustrados para resolver sus problemas cotidianos, lo cual se hacía de manera pacífica y concertada. Nuestros antepasados disfrutaban de una calidad de vida superior a la que hoy se vive en la mayoría de las democracias en desarrollo debido a que su forma de gobierno y su sistema de economía le proporcionaba a un mayor porcentaje de la población las necesidades básicas de alimento, ropa, refugio y una ocupación digna que no dependía de lesionarse ellos mismos o a los demás para tener éxito. Cuando se computa el gigantesco incremento en la proporción de pobres que pasarán sus vidas enteras sin la más leve esperanza de obtener siquiera un mínimo nivel de prosperidad y a eso le sumamos el lacerante declive de la salud humana reflejado en el alarmante aumento de enfermedades crónicas como el cáncer, la diabetes, la obesidad y aflicciones coronarias a pesar del ascenso tecnológico, junto con la creciente miseria producto de una avaricia desbocada, es fácil deducir que nuestros antecesores vivían mejor antes que ahora. Súmele a lo anterior la degradación moral de una condición humana infectada por pornografía, prostitución, abuso infantil y drogadicción y recientemente avasallada por un caos ambiental que cada día se manifiesta con devastadores fenómenos meteorológicos que causan la destrucción del hábitat, lo cual desemboca en hambruna, desplazamiento humano masivo y el aniquilamiento de invaluables especies animales, entonces, en virtud a una indeclinable lógica, la sumatoria de estas espantosas condiciones nos lleva a deducir de manera concluyente que para nuestros ancestros la democracia y el capitalismo han sido un fenomenal fracaso en lo que concierne su bienestar individual y colectivo. En contraposición a las estructuras socio-políticas de antaño, la democracia no garantiza el liderazgo de los más capaces. Muy lo contrario, un somero escrutinio de las administraciones democráticamente elegidas en América en los últimos cien años revela como demasiados de estos gobiernos fueron ocupados por dirigentes incompetentes y/o deshonestos que le dieron un pésimo manejo a sus respectivas naciones lo cual les granjeó la malquerencia de sus conciudadanos al punto que algunos fueron asesinados y otros forzosamente desterrados al exilio. La historia de los Caribá no habla de grandes caciques como Jamundí, Tisquesusa y Tupac Amarú cayendo en desgracia con su pueblo, ni este ejecutando, encarcelando o expulsando a sus líderes. La revocatoria del mandato tampoco hacía parte del lenguaje político indígena, desde mucho antes de los tiempos Bíblicos los mandatarios indígenas fueron ciudadanos valientes y honorables que gobernaban por la duración de su vida natural. Basta contemplar el lúgubre horizonte socio-político para observar lo poco que la democracia ha hecho por el progreso moral, social y económico de los indígenas y lo mucho que ha contribuido al deterioro de su vida en general. Desde el advenimiento de la democracia el porcentaje de indígenas que existen en la inopia es mucho mayor que aquel del planeta pre-democrático. La democracia es un fallido sistema político impuesto de lejos, ni un solo pueblo indígena en el continente ahora llamado América consideró el gobierno por las mayorías como una configuración política viable. Los elegidos a participar en el Cabildo de Sabios lo eran por poseer una elevada cognición producto de una amplia experiencia que solo se obtiene con los años. Estos ancianos a su vez habían recibido un legado que les inculcaba obrar siempre a favor del bien común. Coincidencialmente, muchos gobiernos indígenas estuvieron de acuerdo que la tarea de tomar decisiones vitales para su bienestar y supervivencia no podría ser adecuadamente ejecutada por las masas que no se encontraban debidamente preparadas para ello. Nuestros ancestros nativos poseían una perspicacia intrínseca que les permitía reconocer las cualidades de un líder natural, el cual instalaban por la duración de su vida útil. Su sentido común inherente les decía que mientras más tiempo los dirigentes ocupaban su cargo, más aprenderían y por obligación gobernarían mejor. Por ende, con toda razón les parecía que cambiar de liderazgo en virtud de un capricho político era una tontería. La mujer indígena posee conocimientos biológicos muy superiores al de su contraparte europeo, lo cual le permite ejercer su sexualidad con mayor responsabilidad. Consecuentemente, nuestras antepasadas evitaban la sobre población y se abstenían de traer al mundo hijos no deseados. La estructura societaria pre-colombina no colocaba a sus habitantes en condiciones de inseguridad social donde se vieran obligados a realizar actos denigrantes o inmorales para cuidar adecuadamente de su progenie. Tampoco a nadie debe sorprender como los pueblos indígenas sometidos al desarraigo y exterminio hace tiempo condenaron la democracia y el capitalismo como una forma de vida perniciosa que corrompe la fibra moral y gradualmente destruye la madre tierra.Afortunadamente muchos indígenas están redescubriendo sus valores ancestrales y recuperando su fortaleza interior para reafirmarse y exigir el retorno a sus costumbres nativas. Transcurrió casi medio milenio para que los nativos del altiplano Boliviano pudieran ser dirigidos nuevamente por uno de los suyos e indiscutiblemente los ojos del mundo estarán observando el desempeño de Evo Morales. Sin embargo, los de Caribá saben que no tienen por que preocuparse, ya que sus hijos sobresalientes son mucho más ecuánimes, considerados, ambientalmente sintonizados e inteligentes que los de allende.

Tuesday, May 02, 2006

Radio osCurantismo Nacional

En la madrugada del Domingo amanecí emocionado con la expectativa de escuchar el Gran Premio de San Marino y afanosamente prendí la radio unos minutos antes del comienzo de la apetecida transmisión de RCN. Fue grande mi sorpresa cuando me topé con un extraño programa que aun no comprendo como llega a una de las cadenas radiales más importantes del país. Una mujer de voz indecisa exhortaba al radio escucha acerca de un tema que apenas puedo describir como una desabrochada mezcolanza de medicina natural, religión, superstición y numerología. Todo este cocido envuelto en un lúgubre manto de oscurantismo cuyo principal motivo es ganar dinero infundiendo una especie de terrorismo espiritual al peor estilo medieval. La mujer decía hablar en representación de unas "mentes preparadas" para eliminar toda suerte de malestares físicos y mentales con plantas medicinales y algo llamado la Llave del Poder. Sin describir exactamente como funciona la misteriosa llave o que tipo de preparación académica posee estas mentalidades, aseguró que también están facultados para emitir números de 4 y tres cifras de acuerdo al signo del zodiaco con el propósito de asistir aquellos nacidos bajo estas influencias astrológicas en ganar algún juego de azar. Acto seguido se despachó con una atolondrada perorata asegurando como las enfermedades que nos aquejan es producto de maleficios infligidos por sectas satánicas y/o física brujería, como él tal mal de ojo. Es difícil imaginar donde acudiría una persona para adquirir tales conocimientos y que clase de gente rompe el ayuno con semejante brebaje. Pero se supone que son suficientes como para que a los dueños de sipote despropósito mediático les alcance y sobre para contratar espacio radial en una cadena tan prestigiosa como RCN.Sin duda las plantas medicinales ejercen efectos benéficos sobre sus consumidores; sin embargo, es importante investigar exactamente que porcentaje de ganadores arroja los números recomendados para cada signo zodiacal. Con lo que si no comulgo es la aseveración hecha por la pitonisa hertziana que algunos malestares son producto de maleficios y que estos podrán ser remediados con la famosa Llave del Poder. Como estudioso de los efectos de la alimentación sobre la salud, puedo asegurar sin temor a equivocarme que la gran mayoría de patologías que se presentan en el organismo humano provienen de una alimentación descontrolada, generalmente por el consumo de comestibles carente de nutrición, como la llamada comida chatarra. El que come demasiado azúcar eventualmente contraerá diabetes, igual aquel que consume grasa animal en exceso se le acumula el colesterol en el torrente sanguíneo, lo cual ocasionará el taponamiento de las arterias, circunstancia que frecuentemente resulta en infarto. Sobra decir que estas condiciones biológicas nada tienen que ver con que uno le caiga mal al vecino y solo se remedian regulando la ingestión de azúcar y grasa, de lo contrario no hay planta que altere el resultado, mucho menos llave que libere algún poder. No es más que visitar cualquier clínica y observar al diabético e infartado para darse cuenta que si no ajusta su dieta simplemente se muere; no sin que antes padezcan muchísimo sufrimiento y por lo general quedan en la bancarrota.
RCN incurre en un grave acto de irresponsabilidad social al permitir la transmisión de cuestionables programas que no tienen fundamentación científica alguna y se aprovechan del desconocimiento de la audiencia. No es moral ni éticamente aceptable que un medio tan importante permita que se le engañe al oyente con el único fin de ganar dinero. Personas razonables dentro del gobierno deben acabar con la tendencia peligrosa de dejar que entidades de dudosa procedencia e intención se apoderen de los medios de comunicación con el fin de amedrentar a los menos aprendidos para someterlos mentalmente y limpiarles los bolsillos.Cada día vemos con mayor preocupación como la radio y televisión recurren a métodos suspicaces para lucrarse y se les extiende un llamado para que recapaciten en su proceder y tomen conciencia del daño que le hacen al pueblo más vulnerable. La desigualdad social representa pobreza y es este el factor predominante de nuestro conflicto interno; sin duda la manera más expedita de resolverla es adoptar una conducta de compromiso social en la cual hemos de comprender la importancia de buscar maneras de lograr el progreso económico sin empobrecer más a los que ya lo están. Mejor haría RCN en alquilar espacio a personas realmente comprometidas en ayudar al prójimo y no ha personajes infectados por esa codicia perniciosa que literalmente devora al planeta.